ZP, ese hombre - III parte

9.- Sobre la ESCLAVITUD debemos saber que:

· El tráfico de esclavos se realiza en países de mayoría musulmana y lo sufren Angola, Sudán, Somalia, Chad, Benín, Burkina Faso, Camerún, Côte d'Ivoire, Gabón, Nigeria y Togo. Las niñas de Benín y Togo son muy codiciadas por familias musulmanas pudientes de Lagos, en Nigeria, o Libreville, en Gabón. El 95% de ellas menores de 15 años y las hay incluso de 10 años.

· Tungirapa es una localidad cercana a Dhaka, capital de Bangladesh. Más de 1.000 niños, la mayoría mujeres, han desaparecido en los últimos años. La razón: han contactado con ellos intermediarios que les han engañado con ofertas de trabajo en diversos países del Golfo Pérsico, donde trabajarán en régimen de esclavitud sexual.

· En Sudán se realizan incursiones en aldeas del sur del país para llevarse a las mujeres y jóvenes, a las que ejecuta por el camino si no siguen la marcha forzada hacia el Norte. Allí las esclavas son distribuidas a sus amos y habitualmente sometidas a palizas, abusos sexuales y obligadas a trabajar sin remuneración. Y en un alarde de tolerancia religiosa, forzadas a convertirse al Islam.

· El Departamento de Estado norteamericano estima que en Sudán existen 90.000 personas (negros en su mayoría) esclavos de algunas de las tribus árabes del país. Otras fuentes elevan esta cifra hasta los 300.000

Todo esto sucede en nuestros días y los beneficiarios de esta lacra suelen ser musulmanes.


10.- Sobre el MACHISMO debemos saber que:

· Su religión está hecha por alguien que puso a la mujer a sus pies y la convirtió en objeto sexual para su placer.

· A la mujer se le niega todo placer sexual mediante la amputación del clítoris ya que ella está para dar placer al hombre, no para recibirlo.

· En el islám no les interesa que esto cambie y que no interesa cambiar a otra religión donde los favores sexuales hay que ganárselos y no se imponen por ley.

· Lógicamente, el Islam es defendido por hombres que no están dispuestos a renunciar a tantas ventajas disfrazadas de ética religiosa.


Ellos predican el temor a Alá y llevan razón; hay que tener temor de Alá a la vista de cuanto puede leerse en sus textos sagrados.

Dicen que hay otro Islam más amable, pero tampoco es de fiar. Utiliza el mismo código de conducta. Es una bondad aparente. Es la “paz momentánea”

Su sistema de valores no es en absoluto superior al nuestro, pero esto es lo que va a ser financiado por quienes no dudan en tildar de racistas y xenófobos a los que simplemente nos atrevemos a recopilar algunos aspectos de tal doctrina. A quienes lo facilitan y pretenden imponernos todo esto ¿cómo habría que llamarlos?

ZP nos está metiendo en un callejón sin salida en muchos temas graves para la supervivencia de la nación española. Y el tema islámico es el próximo problema que ya empieza a ponerse de manifiesto.

En España podría suceder lo mismo que suceda en Europa, pero aunque en un principio opinaba que el ejemplo francés llegaría hasta nosotros tarde o temprano, si tenemos en cuenta que tales movimientos subversivos parecen estar organizados y que no obedecen a acciones espontáneas de grupos improvisados, la amenaza se alejará de nosotros.

Los desórdenes franceses provocarán medidas para evitar que vuelvan a repetirse y se modificarán las leyes convenientemente para satisfacer las consecuentes protestas ciudadanas. Si eso sucediera en España, una de las medidas exigidas al Gobierno sería un mejor control de las fronteras y eso es precisamente lo que no quiere ningún cabecilla de los movimientos musulmanes que están invadiendo Europa. No serán ten estúpidos como para provocar que se les cierre la mejor puerta de entrada en Europa que jamás tuvieron.

ZP puede estar tranquilo porque el tema musulmán no le estallará a él en la cara y tardará unos años, cuando ellos crean que son bastantes en número para darnos la batalla.

Antes me preguntaba ¿cómo piensa ZP hacer compatible esto con nuestras leyes y moral? Pues muy fácil. No piensa hacerlas compatibles porque nuestras leyes y sobre todo nuestra moral le importan un pimiento. Basta con ignorarlas y dejar que los acontecimientos se sucedan según lo previsto.

Entonces recogerá la cosecha de lo que está sembrando hoy.



Nota: Por su amplitud omito incluir las fuentes de cuanto recopilo, aunque están disponibles y son del dominio público.